Ciudad de México ha aprobado hoy una medida pionera en América Latina para regular la actividad de la Airbnb en su territorio. A partir de ahora, Airbnb tendrá que cargar un 3% de impuestos a los clientes que quieran alojarse en la ciudad. De esta manera se pretende calmar los ánimos de los hoteleros, que se quejaban de la competencia desleal de Airbnb, mientras que ellos están sometidos a mayores controles de impuestos.
Desde Airbnb en Estados Unidos, no solo se han mostrado conformes con la decisión de la Ciudad de México, sino que también han alentado a otras ciudades a que sigan los mismos pasos, según informa El País América. Este impuesto del 3% aparecerá directamente en el pago del cliente, por lo que los «host» o anfitriones no tendrán que asumir el cargo adicional y podrán mantener los precios de sus propiedades. Así las cosas, Ciudad de México dice «sí» a la economía colaborativa, pero con regulaciones, al igual que ha hecho con otros servicios como Uber.
La medida entrará en vigor el próximo 1 de junio y se espera que ayude a fomentar la economía de Ciudad de México, que se convierte así en la primera ciudad de toda América Latina en regular la actividad de Airbnb en su territorio.
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