Una fotografía captada recientemente en Kenia muestra a dos leones macho en actitud de apareamiento, algo que no ha sido bien encajado por la comunidad del conservador país africano. El fotógrafo Paul Goldstein consiguió fotografiar a los dos felinos en actitud cariñosa dentro del parque Masai Mara, situado al sur del país. Según líderes de la zona, «los leones no son homosexuales por naturaleza».
Entonces, ¿a quién se culpa de su comportamiento? Al turismo gay. El protagonista de tan atrevida acusación es Ezekial Mutua, el responsable del Instituto de Clasificación de Películas de Kenia, que cree que los leones han sido pervertidos por el turismo gay en la zona. Los animales habrían «aprendido estas conductas inadecuadas de los homosexuales». Unas declaraciones que han sentado mal en las redes sociales.
If our lions begin this homosexual behaviour then that will surely be the end of the animal species. https://t.co/JL5wGR4NHW
— Dr. Ezekiel Mutua, MBS (@EzekielMutua) November 2, 2017
Tras la avalancha de críticas, ñejos de retractarse, el líder keniano ha añadido que «esos leones están poseídos por el demonio, ya que no es algo que solo pueda ocurrir a los seres humanos».
La solución de Mutua es apartar a los dos leones con «este comportamiento extraño» del resto de animales y tenerlos «aislados». El líder ha asegurado que si se mantiene a los dos leones en ese ambiente, «puede suponer un peligro para la especie animal«.
Estos comentarios han causado un gran revuelo en la comunidad LGTB, que ya de por sí es conocedora de las trabas que sufre el colectivo en África.
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