103 personas tenían programado viajar desde Durango a Ciudad de México el martes pasado. Se trataba de 99 pasajeros, incluyendo nueve niños y dos bebés y, además, había cuatro tripulantes. Instantes después del despegue, el avión de Aeroméxico se desplomó, aunque sin dejar víctimas mortales.
«Sentí como si el avión estuviera luchando contra la lluvia y el viento antes de que impactara con el suelo dos veces», le dijo a CNN, Anabel Estrada, pasajera del vuelo 2431AM. Todo apunta a que la causa del accidente está relacionada con las malas condiciones climáticas. De hecho, el gobernador de Durango, José R. Aispuro, corroboró dicha teoría ante los medios de comunicación que se encontraban en el lugar. «La torre de control notó fuertes corrientes de viento y esto pudo haber causado el accidente», dijo. No obstante, aún debe realizarse la debida investigación.
En principio, el ala izquierda del avión tocó el suelo, ocasionando que se desestabilizara y volviera a colisionar, para perder sus dos motores. A continuación, el avión se deslizó unos 300 metros fuera de la pista del Aeropuerto Internacional Guadalupe Victoria ubicado a unas 550 millas al noroeste de la ciudad capital mexicana.
«El segundo impacto fue mucho más fuerte. Fue entonces cuando salté y golpeé mi cabeza contra el techo», dijo la pasajera Estrada. «Vi llamas en la cabina delante de mí», aseguró.
103 personas sobrevivieron al accidente de Aeroméxico
La evacuación se realizó utilizando los toboganes de emergencia, justo antes de que el fuego se propagara por toda la cabina. Según reportes de CNN, 49 personas fueron hospitalizadas, el resto recibió atención medica por heridas leves. El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, confirmó que las personas afectadas fueron tratadas en diferentes hospitales de la localidad.
El piloto destaca entre los heridos de mayor gravedad, aunque su condición es estable. También una niña que sufrió quemaduras está siendo atendida. El director ejecutivo de Aeroméxico ha lamentado el incidente y se ha puesto a disposición de las familias afectadas.
La aeronave fue fabricada hace 10 años por Embraer, una compañía brasileña cuyos representantes han dicho que ayudarán a las autoridades mexicanas en sus investigaciones. Asimismo, aseguraron que sus técnicos viajarán al lugar del accidente.
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