Una compañía aérea china, Hainan Airlines, ha realizado un vuelo desde Pekín a Chicago. La novedad de este vuelo está en el combustible utilizado para el avión: aceite de cocina reciclado. Éste ha sido el primer vuelo transoceánico que se realiza con esta clase de combustible. La duración del vuelo superó las 12 horas.
Con anterioridad, en el año 2015, la citada compañía ya había realizado un vuelo entre Shanghái y Pekín con cien pasajeros a bordo, en el que se empleaba este biocombustible mezclado con fuel tradicional, en un Boeing 787.
Aunque el inconveniente es su elevado coste, hay que destacar que el factor contaminante es sumamente destacable ya que, con relación al queroseno, el combustible elaborado con aceite reciclado reduce la emisión de dióxido de carbono en una proporción nada desdeñable, que se encuentra entre un 50% y un 80%. Además, según las declaraciones recogidas por la agencia oficial china Xinhua, garantiza la seguridad y la eficiencia de vuelo.
La aerolínea china pretende abaratar los costes del nuevo combustible, para crear una «ruta verde» entre China y Estados Unidos.
Un precedente de este experimento lo protagonizó Lufthansa. La compañía aérea alemana ya utilizó este biocombustible en el año 2011.
A partir de ahora habrá que prestar una mayor atención al reciclaje del aceite de cocina, teniendo en cuenta que nos puede valer para contribuir a la mejora del medio ambiente.
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