Harry Potter llega a Madrid: Guía para visitar todas las esculturas

Un doble aliciente para los fans de Harry Potter ha llegado a Madrid. Se trata, por un lado, de una reproducción escénica del mundo Potter en IFEMA y, por otro lado, de la presencia de algunos de sus protagonistas en las calles de la capital de España.

En la exposición instalada en IFEMA se pueden ver no sólo la reproducción de algunos de los escenarios de las películas, sino también múltiples objetos, localizaciones, vestuario y otros elementos para vivir de cerca todo lo que rodea la magia de un protagonista imprescindible en el campo de la imaginación.

Esta exposición itinerante de 1.400 metros cuadrados sólo se podrá ver en algunas ciudades. En España el único privilegio de disfrutarla será en su capital. La exposición se puede visitar todos los días de la semana excepto los lunes y estará abierta desde el próximo 18 de noviembre hasta el 18 de enero de 2018.

Localización de las esculturas de Harry Potter en Madrid
Localización de las esculturas de Harry Potter en Madrid

De forma paralela, y para recordarnos que Harry Potter está en Madrid, se han instalado cuatro esculturas gigantes en algunos lugares de la capital. Dobby, el sombrero seleccionador, el Ford Anglia de color azul y la Nimbus 2000, la más ansiada escoba voladora.

Podemos hacer un recorrido por los lugares más céntricos de Madrid para visitar a estos protagonistas.

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Comenzamos por Dobby, que se encuentra presidiendo la Glorieta de Bilbao, el pequeño elfo doméstico que ansiaba y lograba finalmente ser libre. En este caso alcanza una altura de 1,60 metros.

Escultura de Dobby en Madrid

Desde la Glorieta de Bilbao, podemos caminar unos diez minutos y llegar hasta la Plaza de Colón, donde se encuentra el sombrero seleccionador. La escultura mide 3 metros de altura por 4,5 metros de ancho. En la ficción, este peculiar sombrero cobra vida propia y es el encargado de adjudicar a los estudiantes la casa a la que deben pertenecer.

Desde este lugar, y después de un corto paseo de unos nueve minutos, podemos llegar hasta la Puerta de alcalá, donde nos espera un majestuoso Ford Anglia de color azul que el padre de los Weasley modificó para que pudiera volar. El vehículo parece desafiar la Puerta más famosa de la ciudad con sus 4 metros y medio de largo por 1,4 de ancho.

Si quieres finalizar este recorrido, todavía te espera la Nimbus 2000, a unos 18 minutos caminando desde la Puerta de Alcalá. La famosa escoba voladora tiene una medida de 2,4 metros de largo. Sin duda esta reproducción sería deseada por cualquier buen jugador de «quidditch».

Desde el Ayuntamiento de Madrid han querido resaltar la colaboración con diferentes compañías para «mantener la fuerte apuesta por el cine, la cultura y por la proyección nacional e internacional de la ciudad». Los ciudadanos y fans de Harry Potter pueden estar satisfechos.

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