Un vuelo de Air France que hacía la ruta París-Los Ángeles tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia este sábado al sufrir graves daños en uno de sus motores. Tras cinco horas de vuelo, se escuchó una fuerte explosión en una de las alas. El avión comenzó a vibrar intensamente durante unos minutos. Una de las turbinas había explotado en pleno vuelo.
Así ha quedado el motor de un avión tras la explosión que ha sufrido en pleno vuelo París-Los Ángeles https://t.co/AGQu3CSjZO pic.twitter.com/yl5WD00yxZ
— LYXPLANET (@LYXPLANET) October 1, 2017
Los pasajeros comprobaron con horror cómo uno de los motores había quedado totalmente inservible. En los vídeos captados por los mismos, se puede observar el estado en el que quedó la turbina, con piezas sueltas y colgando. Según los testigos, se vivieron momentos de nerviosismo, «ya que tras la explosión, se sintió cómo el avión caía durante unos segundos«. Unos 20 minutos después de producirse el incidente, el capitán anunciaba «con nerviosismo» que una de las turbinas había explotado.
Dos horas más tarde, el avión conseguía realizar un aterrizaje de emergencia en la pequeña población de Goose Bay, Canadá, sin lamentar ninguna víctima. Los pasajeros tardaron varias horas en abandonar el avión, ya que este aeropuerto no está acondicionado para lidiar con un Airbus 380, el más grande del mundo.
De momento, Air France no ha adelantado detalles sobre qué habría causado la explosión, pero en un comunicado ha felicitado a la tripulación por su actuación y por haber logrado que el avión aterrizara en la pista de Goose Bay sin mayores problemas.
De esta manera, queda demostrado que un avión puede aguantar varias horas en el aire a pesar de haber perdido uno de sus motores. Los pasajeros se tomaron el incidente con humor.
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